A ti, esa persona que has estado y espero estés mucho tiempo a mi lado, a ti quiero dedicarte estas frases. Son muchos años los que hemos reído, llorado, pensado de diferente manera, pero en todo este tiempo siempre me has demostrado que has estado ahí, apoyándome, y haciéndome ver la vida de una forma totalmente positiva.
Ahora soy yo, quien hoy, he puesto todo mi empeño en sacar lo positivo de esta prueba que te/os ha puesto la vida, pero no he podido, lo siento. Lo he intentado con todas mis fuerzas, con todas, pero sé que mis palabras -hoy- no te alivian tu/vuestro dolor.
No voy a entrar a hacer preguntas absurdas que por más que lo intentemos jamás obtendremos respuestas, no voy a hacerlo. Sólo escribirte algo que tú bien sabes: aquí estoy y estaré. En el momento que me necesites, a cualquier hora, levanta el teléfono y ahí estaré. Por las circunstancias físicamente no va a poder ser, algo que me cuesta asimilar pero que entiendo perfectamente. Hoy no deseaba escucharte por teléfono quería poder haber estado allí y abrazarte, decirte con el corazón que todo va a salir bien, que adelante, que no hay que rendirse, porque va a ser así.
Esto sólo lo veremos como algo importante por lo que estás/estáis pasando y por las calles de Madrid sólo pensaremos en sonreír y correr.
Tú eres la persona que me hiciste cambiar la forma de ver la vida, la que estuviste a mi lado cuando sólo veía oscuridad, la que me enseñó que hay luz si de verdad nosotros deseamos verla. No te rindas, jamás. Yo estoy a tu lado, siempre lo estaré. Sé fuerte. Sé que te pido mucho, lo sé, pero ambos debéis ser fuertes y superar pasito a pasito todo esto.
Hoy querría escribirte mil y una palabras de apoyo por el whtasapp pero sé que no es el momento, que tu cuerpo está cansado y necesita caer para levantarse, lo sé. Por eso mañana, u otro día, cuando sienta que puedo te llamaré o iré a verte/veros y te daré ese abrazo que tanto deseo.
Sé fuerte, por favor. Te quiero.